Como escribió Miguel Hernández: "...tristes hombres sino mueren de amores. Tristes, tristes.
Y, lo asombroso, es que creo que funciona. Poco a poco, de forma imperceptible, sonrisa a sonrisa, gesto a gesto, ese sentimiento flotando en el aire, va creciendo, y termina transmitiéndose y contagiando a todo el mundo (Ojala no encuentren nunca la vacuna para esta epidemia)
Y por qué esperar a que me lo recuerde el calendario, o la publicidad. Desde ahora me propongo no volver a olvidarlo (aquí está este texto para avergonzarme si así lo hago), y tener siempre presente que es lo verdaderamente importante, en cualquier día del año, en cada momento.. familia, amigos.. personas que precisan tu comprensión, un gesto, una caricia
Porque sólo hay una cosa que necesito.. All I want for christmas is you
No quiero mucho para Navidad.
Sólo hay una cosa que necesito.
No me interesan los regalos
debajo del árbol de Navidad.
Sólo te quiero para mí,
más de lo que podrías imaginarte.
Haz que mi deseo se haga realidad.
Todo lo que quiero para Navidad es a tí.
-"¿peor? peor que la angustia de estar enamorado?"
Y de perdidos... pues eso! me estiro bien y ya estoy preparado para recibir y ser atravesado por la siguiente flecha ALL YOU NEED IS LOVE
Una vez han caído las máscaras, después que he comprendido que el corazón no puede estar en un escaparate, protegido por una vitrina; que es ese viejo y raído jersey, deshilachado y lleno de remiendos, que me acompaña siempre y que cuando me viste me siento realmente yo... es entonces cuando se muestra, y puedo ver y sentir, que en realidad, el amor está en todas partes, si tu quieres.. love actually is all around (también en las islas meigan)
"¡Vale papá, hagámoslo! ¡Y que el amor nos cosa a leches!
“Siempre que me siento pesimista por cómo está el mundo, pienso en la puerta de llegadas del aeropuerto de Heathrow. La opinión general da a entender que vivimos en un mundo de odio y egoísmo, pero yo no lo entiendo así; a mí me parece que el amor está en todas partes. A menudo no es especialmente decoroso, ni tiene interés periodístico, pero siempre está ahí: padres e hijos, madres e hijas, maridos y esposas, novios y novias, viejos amigos... Cuando los aviones se estrellaron contra las Torres Gemelas, que yo sepa, ninguna de las llamadas de los que estaban a bordo fue de odio y venganza, todas fueron mensajes de amor. Si lo buscáis, tengo la extraña sensación de que descubriréis que el amor, en realidad, está en todas partes"
3 comentarios:
No te esfuerces que aquí en las islas si no tienes dinero no mereces unas felices fiestas!!!
Yo me he puesto en traje de antinavidad...porque cuando pareces feliz y bueno se creen que estás drogado o borracho!
EStoy enfadada hoy!Y me da igual la navidad y su leche en vinagre.
Lo siento, ya sabes de mi carácter calmado...
Tú que bien lo mereces pasa unas felices fiestas en mi ya no tan lejana ciudad, mil besos
Cada vez que me hago más mayor la navidad me parece... "especial".
Porqué nadie se pone deacuerdo en qué es: si amor, si paz, si consumismo desaforado, si gasto superfluo, fiesta cristiana, celebración de la fiesta pagana por la entrada del invierno...
Y además... no me gustan.... nada. Yo creo que ni de pequeña.
Pero he de decir que la gente "respira diferente". Y sólo por eso... deberíamos de mantenerlas. Como las buenas manifestaciones.
Lo mejor es pararse, sentarse y observar... observar de los amigos que tenemos, de las personas que amamos. Y en esa pausa pensar... todavía somos seres afortunados pues tenemos un hombro amigo y leal. Ni el mejor regalo, ni el mejor viaje... nada se asemeja a una mirada de cariño y complicidad.
En las pequeñas cosas "tal vez" se encuentre la navidad.
Y sí, dejemos que el amor haga estragos en nuestra alma.
Si no nos convertiremos en seres insensibles, fríos... a los que nos importará un comino el prójimo.
Así que Feliz Navidad.
Un beso
Carmi
Una vez más, Xesús, me das con el limónentólafrente (que decía Kiko Veneno)... Adoro esa película como tú, recuerdo siempre ese eropuerto cargado de esperanza...
Es de las pocas cosas que me hacen sonreir sinceramente.
Hay que creer y tener fe, siempre vienen caídas ¿Qué te puedo contar yo? Pero con el corazón abierto, a pesar del miedo, se absorve todo... También lo bueno.
No hay otro modo.
Quizás sea un tributo a pagar por disfruta tanto de las cosas que merecen la pena.
Un beso gigante,
Mar.
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